A propósito de los XXII Juegos Olímpicos de Invierno que se llevan a cabo en Sochi (Rusia) hasta este fin de semana, Fast Co. Design publicó este artículo sobre el diseño de los logotipos creados para algunos de ello (los logos presentados en el mismo fueron originalmente coleccionados por Colorlib):
“Si usted no es un admirador del diseño minimalista de los Juegos Olímpicos 2014, piense que este pudo haber sido mucho peor.
Como prueba considere estos logotipos de los Juegos Olímpicos entre 1924 hasta 2020. Hay logotipos hermosamentes diseñados a lo largo de la rica historia de los Juegos Olímpicos, pero lamentablemente, esos son la excepción, no la regla. Es interesante notar las tendencias de diseño en este viaje en el tiempo, pero más interesante es notar los crímenes contra el diseño.
Comenzando con el verano de 1984, por ejemplo, parece ser que un loco tipográfico tomó control del Comité Olímpico Internacional, y en sus 14 años de reino de terror, le arrancó la cabeza a quien sugiriese usar una fuente tipográfica que no viniese reinstalada con Microsoft Word. Con la excepción de Sarajevo 1984, donde usaron Paralucent,y Nagano 1998, que lleva Amira, todas las fuentes de esa era son infames, ¿no es verdad Barcelona?
Revisitando casi un siglo de logos Olímpicos, lo que sobresale es lo confuso y poco atrevidos que han sido los últimos 30 años de diseño olímpico. En las décadas de los 60 y 70, los logos olímpicos eran realmente buenos. Tomen en consideración el hermoso emblema tricolor de los Juegos Olímpicos en California 1960, le espectacular tipografía de M´xico 1968 y la severa espiral de Munich 1972. Es como para lamentarse de las oportunidades perdidas.
El logo de Sochi 2014 es uno de los mejores en un buen rato, pero no hay que negar que la realidad de los Juegos Olímpicos es el diseño por comité y eso se refleja sobretodo en los logos de los juegos que se celebran cada dos años”.
Entradas
No hay comentarios.:
Publicar un comentario